El Salvador escala 18 puntos en informe mundial sobre las TIC

Carlos Molina Medrano*

Impulsado más por la inversión privada que por el aporte del sector público, El Salvador ha saltado 18 puntos en el Global  Information Technology Report del Foro Económico Mundial. Del puesto 98 pasó al número 80 en tan solo 1 año[1].

Como ya se ha señalado en anteriores escritos, una de las ventajas de El Salvador es su pequeño  territorio, lo cual contribuye a que la infraestructura de las empresas privadas ligadas al sector de las TIC puedan acercar dichas tecnologías a la población. La concentración de población en áreas urbanas suma considerablemente a la hora de analizar las estadísticas de cobertura, lo cual para este informe contribuyó sustancialmente al crecimiento.

Según el mismo informe, El Salvador ha pasado de ocupar  el puesto 103 en el año 2012, a colocarse en el puesto 80 en el 2015. Tan solo en 3 años subió 23 puestos y se puso sobre países como Brasil, la India, Perú, Jamaica, entre otros que estaban arriba [2, p. 15].

En los pilares donde mejor salió ubicado El Salvador es en el de asequibilidad, que hace referencia al bajo costo para acceder a la tecnología, en este se ubicó en el puesto número 74 y en el de infraestructura, lo ubicó en el número 63 [2, p. 153] . Tal parece ser que en este caso el mercado ha funcionado, en la medida que la creciente demanda ha producido la baja en los precios de ciertos productos y servicios tecnológicos, lo cual a mediano plazo también puede tener un límite.

En los otros dos pilares donde El Salvador ha resultado muy bien evaluado, es en el del uso de las TIC en los negocios, en el cual alcanzó el puesto 59 del ranking  y en el del uso de las TIC en el gobierno, que alcanzó el puesto 64. Así mismo en el impacto social se ubica en el puesto 69 [2, p. 153].

Pero los retos que debe asumir El Salvador en materia de absorción de las TIC son las que delinean los desafíos para el país, los cuales van más allá del mercado y están directamente vinculados con la educación y el impacto económico.

Los pilares en los que aparece débil el país están relacionadas con las habilidades en el uso las TIC, en donde aparece en el puesto 97. En el uso individual de las TIC donde alcanza el puesto número 96 y en el impacto económico de las TIC en el puesto 94 [2, p. 153].

El informe parece tener mucha coherencia en este sentido, ya que los esfuerzos educativos en torno al fomento y el uso de las TIC en la educación han sido muy precarios en El Salvador. Revisando lo que han hecho otros países al respecto, nos encontramos con casos como el de Panamá y Colombia que están haciendo esfuerzos grandes en sus sistemas educativos no solo por dotar de equipo a los estudiantes, sino por actualizar sus programas de estudio desde los niveles iniciales incorporando metodologías que implican el uso de las TIC. Así mismo, desarrollan programas permanentes de formación dirigidos a diversos sectores de la población.

Con el crecimiento en la formación en las TIC vendrá luego el impacto económico, por su puesto que, no viene por añadidura, tienen que diseñarse estrategias y políticas desde el gobierno y desde las mismas gremiales empresariales y desde la misma academia, para hacer verdaderas apuestas para el desarrollo de una industria de las TIC, ligada más a la producción de software para los distintos sectores, al desarrollo de la infraestructura y a la formación. Lo que traerá consigo mayor necesidad de personas formadas en esta área, por lo tanto mayor empleo.

Por otro lado, es importante revisar algunos datos del mismo informe que resaltan los problemas económicos que tan bien afectan el acceso de la población a las TIC. El acceso a los teléfonos móviles alcanza el 136,2 % lo que indica que el costo de la telefonía es bajo, pero el uso individual del Internet es tan solo del 23,1% y el uso de computadora con internet en el hogar apenas del 12,7 %, lo que indica que  una gran porción de familias salvadoreñas no tienen la capacidad de pagar servicios como el de Internet.

Las malas finanzas públicas también se ven reflejadas en la baja cobertura de internet en las escuelas, que es de apenas del 4% y refleja además, la poca inversión publica para el fomento de las TIC desde el sector gubernamental. En otro artículo, hemos identificado que la conexión de los establecimientos de salud a Internet llega a penas al 20%.

A nuestro juicio es determinante que el Estado invierta en mejorar el acceso a las TIC en la educación y en salud, dos elementos sustanciales para el desarrollo de todo país. Así mismo, es importante actualizar los programas de estudios e incluir metodologías que tiendan al uso de las TIC, lo cual contribuye a alcanzar aprendizajes más significativos.

Es importante que el país no se quede rezagado en el acceso a las TIC, sin embargo, no es parte de la estrategia del gobierno apostarle al fomento de las TIC; porque sus personeros no dicen nada al respecto. El mercado tiene mucho que decir obviamente porque en juego está el negocio, pero éste encontrará un límite en breve, entonces vendrá el rezago de nuevo. En un mundo tan globalizado las TIC son fundamentales, todo indica que la única política que se ejecuta bien en El Salvador es la de dejar ir las oportunidades. Ésta es una, cuando se reaccione el mundo estará en otra apuesta.

Referencias:

[1]    «Global information technology report». [En línea]. Disponible en: http://widgets.weforum.org/gitr2015-calculator/?utm_content=buffer987dc&utm_medium=social&utm_source=twitter.com&utm_campaign=buffer. [Accedido: 16-abr-2015].

[2]    WEF, «The Global Information Technology Report 2015».

 

*Coordinador de la carrera de Ciencias de la Compùtación de la Universidad Luterana Salvadoreña