Evaluación institucional: aproximación teórica conceptual
Mauricio Manzano*
Tener claridad en los conceptos es el primer paso para definir y entender las cuestiones en el campo educativo, además nos ayuda aplicar los conceptos con precisión y adecuación. Por tanto, las interrogantes que intento responder en esta reseña son: ¿qué es la evaluación? ¿Qué es una institución? Culmino haciendo un ensayo del concepto de evaluación institucional.
¿Qué es la evaluación? historia, definición.
La evaluación es una categoría antigua, la encontramos en la China milenaria. Sun Tzu fue un general chino que vivió alrededor del siglo V antes de Cristo, en su libro El Arte de la Guerra dedica todo el capítulo primero a la evaluación de la guerra1. De la aplicación que hace del concepto se percibe una doble vertiente: medición y valentía, cualitativo y cuantitativo. En el Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua, evaluar se define como “señalar el valor de algo o en su segunda acepción, estimar, apreciar o calcular el valor de algo”.
Sin embargo, con frecuencia se hace referencia que la etimología de la palabra evaluación viene del francés antiguo “avaluer” y de valor, es decir, ser vigoroso, tener valor y recibir un premio. La evaluación, por tanto, es un acto de dar un valor o valorizar2. Se puede observar que de la etimología de la palabra también se desprende un doble sentido: por un lado: un valor monetario, evocación cuantitativo; y por otro, se valora cualidades vitales, valeroso, esforzado…
Angéline Martel afirma que algunos siglos más tarde, la evaluación se despoja de estos valores materiales y vitales para apoyarse en su opuesto: la competencia y la culpabilidad por el error3. En los siglos posteriores la valorización en el origen de la palabra se transforma en una competencia que se basa en la devaluación y la culpabilidad: los menos errores posibles. El juicio negativo que conlleva la evaluación, y a la vez la competencia y la culpabilidad, instauran una dimensión de control individual y social4.
En los años 30 Ralph Tyler (considerado el padre de la evaluación) con su Modelo “Congruencia de Objetivos” usa el término evaluación como término alternativo a medición, prueba o examen en consideración de que implicaba un proceso mediante el cual se reconocían los valores.
La evaluación es considerada como “un proceso de obtener información y usarla para formar juicios que a su vez se utilizan en las decisiones” (Terri D. Tenbrink). “Obtención de información rigurosa y sistemática para contar con datos validos y fiables de una institución con objeto de formar y emitir un juicio de valor con respecto a ella. Estas valoraciones permitirán tomar decisiones consecuentes en orden a corregir o mejorar la institución [o persona] evaluada” (Mª Antonia Casanova)5.
En resumen, La evaluación puede ser personal e institucional y apuntan a tres vertientes: información, juicios de valor y toma de decisiones. Y se puede entender de diversas maneras, dependiendo de las necesidades u objetivos de la institución evaluada.
¿Qué hay que entender por Institución?
Definir qué es una institución no es tarea fácil, esto debido a la variedad de modalidades surgida de las interacciones de grupos humanos. Según el diccionario de la Real Academia Española la palabra institución proviene del latín institutio: Establecimiento o fundación de algo. Organismo que desempeña una función de interés público, especialmente benéfico o docente6. De institutio se deriva instituere que significa construir, crear, educar.
Del origen de la palabra se derivan una variedad de definiciones, porque los sentidos que se le atribuyen y los referentes a los que es aplicado son variados. Se habla de instituciones como: estructura, normativas, educativas, privadas, públicas, culturales etc. Es decir, es un concepto social que hace referencia a todas aquellas estructuras que suponen cierto mecanismo de control u orden social que son creadas para facilitar la convivencia humana y que tienen que ver con el desarrollo de lazos y vínculos grupales en diferentes circunstancias o momentos de la vida7.
En una primera aproximación conceptual podemos decir que es un conjunto de relaciones personales u grupales con intereses propios, valores singulares y objetivos afines cristalizados en una estructura. Esta estructura orgánica adhiere un acumulado de ideas, creencias, valores y reglas que condicionan las formas de intercambio social.
Esta idea de institución nos remite a establecimientos concretos: una escuela, un hospital, una iglesia. Sin embargo, el concepto de institución es mucho más amplio que eso y también se aplica a estructuras sociales abstractas en las cuales siempre se representa el vínculo humano; pero que pueden no estar representadas visualmente por un edificio, tal como sucede por ejemplo con la familia, con el matrimonio.
¿Qué es la evaluación institucional?
Una “definición en caliente”, podemos decir que la Evaluación Institucional es una investigación valorativa que se realiza en una organización estructural para obtener información de fortalezas y debilidades que nos sirvan de informacion der cional institcional se debe tener clara que entendemos por institucion. bases firmes para emitir un juicio de valor y tomar de decisiones sobre política institucional, planificación y gestión educativa, administrativa, económica, etc.
La evaluación institucional concebida de esta manera se convierte en un proceso mediático que valora, aprecia y estima la calidad de las instituciones evaluadas. Se trata pues de realizar un análisis de fortalezas y debilidades, un profundo estudio de las características que envuelven la realidad de una organización con el fin de definir una serie de planes de actuación para la mejora de la enseñanza. Vista así la evaluación descarta su carácter coercitivo y punitivo que se le acusa.
En nuestro medio hay una impresión que la evaluación no se contextualiza, y la estandarización en ocasiones menoscaba la diversidad de la realidad. Hay una idea de que “se evalúa para controlar”, en este sentido la evaluación se convierte en una herramienta inquisitiva-punitiva. Se evalúa con una intención de preservar, se saben los resultados, en ocasiones, pero no se posibilitan cambios de mejora. Además, si se tiene una idea de evaluación no tan honesta, los resultados van acompañados de recorte de personal que no responden a la realidad de la institución.
En resumen, de los tres fines de la evaluación: recoger información, juicio de valor, tomar decisiones; la que predomina es el cúmulo de información, en muchas ocasiones mal medidas y mal obtenidas, se emiten juicio de valor subjetivo y luego no se toman decisiones o se toman medidas erradas. Estos rasgos han constituido la evaluación como una herramienta coercitiva-punitiva. Evaluar es sinónimo de mejorar y cada juicio de valor que se emita, y cada decisión tomada debe estar impregnada por principios éticos.
Notas.
1. Cfr. Sun Tzu, El Arte de la Guerra.
2. Cfr. Martel. A (2004), La evaluación social e individual en la era de la educación a distancia y la globalización. Revista Electrónica de Investigación Educativa, 6 (1). Consultado en: http://redie.uabc.mx/vol6no1/contenido-martel.html.
3. Cfr. Ibíd., p. 3.
4. Cfr. Ibíd., p. 4.
5. Cfr. Picardo J. Oscar y otros, Diccionario Enciclopédico de Ciencias de la Educación, San Salvador 2008, p.213.
6. Cfr. Diccionario de la Real Academia Española, versión digital disponible en:http://www.rae.es/rae.html.
7. Cfr. Tomada de: http://www.definicionabc.com/social/institucion.
* Investigador y docente de la Universidad Luterana Salvadoreña.