Informe del PNUD. Mirada crítica a El Salvador
Daniel B. Mina
Un reciente informe de las Naciones Unidas señaló que en El Salvador la mitad de los trabajadores enfrentan situaciones de vulnerabilidad. Entre ellas mencionaron bajos ingresos, falta de seguridad social, inestabilidad en contratos y pobreza.
Además el estudio señala que las mujeres ganan menos y trabajan más, señalando que perciben un 24 % menos de salarios que los hombres en un mismo trabajo. El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) identificó que además en el país las mujeres reciben menos salario que los hombres, a la vez deben atender más actividades por su papel como madres. El propio informe sugirió que el Gobierno desarrolle políticas para que el trabajo familiar sea equilibrado entre padres y madres.
Por otro lado, los jóvenes enfrentan dificultades para insertarse en el mercado laboral, problemática que inicia desde la educación, ya que pocos logran terminar la educación secundaria. Apunta que el 27 % de los jóvenes entre 15 y 29 años no estudian ni trabajan, edad que es la mayoritaria del país. A su vez las personas entre 18 y 29 tienen solo 9.7 años de estudio en promedio y el analfabetismo en las personas mayores de 10 años es de 10.9 %.
El informe de Desarrollo Humano 2015 del PNUD fue presentado en nuestro país por la coordinadora del mismo, Carolina Rovira, y el representante de la entidad, Christian Salazar. Durante su exposición señalaron que en El Salvador, más de la mitad de los trabajadores está expuesta a condiciones vulnerables. Esto porque se ocupan en tareas de servicio doméstico, empleos temporales, empleos familiares sin remuneración o mantienen negocios por cuenta propia, conocidos como empleos informales.
Sumando estos sectores, son cerca de 1.5 millones de salvadoreños que no tienen ingresos fijos, estos ingresos son muy bajos, carecen de trabajo permanente o prestaciones como salud. Solo 1 millón de personas mantiene empleos permanentes según el documento. El PNUD retomó cifras de la Encuesta de Hogares y Propósitos Múltiples 2014, señalando que prácticamente la mitad de los trabajadores sufren de un tipo de pobreza. Bajo esta categoría incluyen a quienes reciben bajos ingresos y a las familias que sufren deficiencias en educación, salud, sanidad o su nivel de vida.
Concluido el estudio el PNUD menciona que el país requiere un diálogo entre empresa, trabajadores y gobierno para reducir estos problemas, recomienda fomentar programas para el cuidado de infantes y ampliar tiempos por maternidad, incluyendo también a los padres. También que se mejore la cobertura del sistema educativo, la formación de los profesores y las condiciones de seguridad en las escuelas y señalaron que el país debe fomentar habilidades emprendedoras en los jóvenes y que los proyectos de emprendedurismo puedan encadenarse a la cadena productiva de grandes empresas.
Al respecto y con el mayor de los respetos por el estudio, señalamos que El Salvador se caracteriza por tener una oligarquía con altos visos retardatarios que raramente tomará un dialogo con los trabajadores, a menos que estos acepten sus condiciones leoninas, no son extraños esos casos documentados por el estudio de los bajos salarios. Por otra parte no se han cumplido las promesas pre electorales que hablaban de más de un 5 % del presupuesto anual de la nación para la educación, el plan de un niño una computadora avanza lentamente, a la vez las experiencias actuales muestran que conectar el “emprendedurismo” de los jóvenes (universitarios) con la gran empresa no resulta cosa sencilla y posiblemente en este punto volvamos a esa oligarquía que no sede un ápice en sus ansias neoliberales de ganancias a toda costa y con bajo costo.
Solo con cambios estructurales reales y profundos, se podrán detener los bajos ingresos y la pobreza, o seguirán ambos indicadores creciendo aumentando la brecha entre esa minoría que tiene cada vez más y los que hoy en El Salvador sobreviven a duras penas.
Colaborador de la Universidad Luterana Salvadoreña